From today’s gospel reading
You shall love the Lord, your God, with all your heart, with all your soul, and with all your mind. This is the greatest and the first commandment. The second is like it: you shall love your neighbor as yourself.
Reflection
Jesus exhorts us to strive more and more to love as he did – not in a minimal way, but in a perfect way: with all our heart, with all our soul, and with all our mind.
So, we ask ourselves
Do we share with one another and are faithful to one another?
Do we go out of our way to please or to surprise those we love?
Do we love in a way that makes non-loving people think we are mad?
See Mark Link, S.J. Illustrated Sunday Homilies. Year A Series II. 1990.
Adapted by Hector Cruz, S.M.
Del Escritorio del Padre Héctor
De la lectura del evangelio de hoy
Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente. Este es el mayor y el primer mandamiento. El segundo es semejante a éste: amarás a tu prójimo como a ti mismo.
Reflexión
Jesús nos exhorta a esforzarnos cada vez más por amar como El lo hizo, no de una manera mínima, sino de una manera perfecta: con todo nuestro corazón, con toda nuestra alma y con toda nuestra mente.
Entonces, nos preguntamos
¿Compartimos los unos con los otros y somos fieles los unos a los otros?
¿Hacemos todo lo posible para complacer o sorprender a nuestros seres queridos?
¿Amamos de una manera tal que las personas que no aman piensen que estamos locos?
Véase Mark Link, S.J. Illustrated
