From today’s Gospel reading:
Jesus said to his disciples, “Whoever wishes to be great among you, will be your servant; whoever wishes to be first among you will be the slave of all.”
Reflection:
Being a disciple is not about power and prestige. It’s not about the first place on the table. It’s about following Jesus’ path of service, even if it means suffering and death. That’s a difficult teaching, no wonder the disciples were deaf to it. In the Lord’s Prayer we ask for “daily bread”, to sustain us in our life of service in Jesus’ name.
So, we ask ourselves:
In what way, does following Jesus require me to be a servant? Where do I receive strength for that role?
By Jude Siciliano, O.P. FIRST IMPRESSIONS. FAITH BOOK. 29th SUNDAY (B) OCTOBER 17, 2021
De la lectura del Evangelio de hoy:
Jesús dijo a sus discípulos: “El que quiera ser el más grande entre ustedes, será el servidor de todos; el que quiera ser el primero entre ustedes será el último y esclavo de todos”.
Reflexión:
Ser discípulo no es tener poder y prestigio. No se trata de ocupar los primeros lugares en la mesa. Se trata de seguir el camino de servicio de Jesús, incluso si eso significa sufrimiento y muerte. Esa es una enseñanza difícil, no es de extrañar que los discípulos fueran sordos a ella. En el Padre Nuestro pedimos “nuestro pan de cada día”, para sostenernos en nuestra vida de servicio en el nombre de Jesús.
Entonces, nos preguntamos:
¿De qué manera, seguir a Jesús requiere que yo sea un siervo?
¿Dónde recibo fuerza para ese rol?
Traducido por Héctor Cruz, S.M.
